Martes, mil horas de vuelo para comprobar que el asunto, en realidad, si era grave.
El miércoles nos dieron la noticia de que un muy querido tío de Pedro, mi marido, había fallecido.
Jueves, día de mi santo y lo pase en terapia media acompañando a mi mamá que también celebraba el suyo.
Viernes, la hemorragia regresó sin encontrar exactamente de que parte del intestino venía.
Sábado, la hemorragia sigue y esperamos la llegada de un enteroscopio para poderle hacer un estudio y ver exactamente que se puede hacer.
Me llega un mensaje con una tristísima noticia. Uno de mis mejores amigos de la universidad murió en un accidente en la carretera. No lo puedo llorar, mi mamá no lo puede saber.
Domingo, cierro la semana con 6 horas de cirugía y 80 cm menos de intestino en mi mamá.
En mi interior, en medio de este remolino, una profunda paz, una certeza de estar bien sostenida, bien contenida.
¿Cómo logras esto?
¿Cómo te mantienes en centro cuando es lo duro Y lo tupido?
1. ENTREGA
A Dios, a los ángeles, a algún santo, a la virgen, al cosmos, al universo, a quien tu prefieras, pero entrega y deja que alguien mucho más competente que tu se haga cargo.
2. CONFÍA
Una vez entregado confía que está en las mejores manos y se va a resolver de la mejor manera posible para todos.
3. SUELTA
Desapegate del resultado, lo que sea, será lo mejor para tu crecimiento.
4. NO HAGAS SUPOSICIONES
Ponle un limite a tu mente y no permitas que los pensamientos se vayan como hilo de media. Tu mandas en tu mente.
5. UN DÍA A LA VEZ
No te adelantes, no te vayas al pasado. Vive el presente momento a momento.
6. ELIMINA EL HUBIERA
Es el verbo más inútil y sólo te lastima. El hubiera no existe, no gastes tu energía en él.
7. CUIDA TU CUERPO
Cuida tu cuerpo, come sano y suficiente. Toma mucho agua y duerme lo más que puedas.
8. CUIDA TU MENTE
Pon a raya los pensamientos negativos y las críticas. Piensa positivo y rodéate de cosas y personas que te hagan sentir bien.
9. CUIDA TU ESPÍRITU
Reza, medita, contempla, lee, o haz lo que acostumbres para conectar con lo divino.
10. RESPETA TUS EMOCIONES
Date un tiempo y un espacio para descargar tus emociones. No las juzgues, sólo sácalas. No las necesitas dentro.
Recuerda que todo pasa y esto también va a pasar.
Lo único real es que eres luz.
Estas oyendo Elena, si, estoy oyendo.
Muchas bendiciones para ti y para mi con todo cariño,
ELENA SANTOS
