Déjame te cuento que estas épocas navideñas no son mis favoritas. La season to be Jolly muchas veces me da pa bajo.
Me he dado cuenta de que no soy la única y como soy bien curiosa, me puse a investigar porque a tanta gente nos da el chipil decembrino y descubrí que hay estudios muy serios que lo explican.
Así que ahí te van:
EL CLIMA
El frío y la falta de sol afectan los niveles de serotonina, el neurotransmisor responsable de la felicidad y el bienestar emocional. No eres tú, es el invierno. Un foco de rayos ultravioletas o un viajecito a la playa, pueden ayudar.
COMPARARTE
Las reuniones familiares y de amigos, tan de la época, nos llevan a compararnos y esa comparación muchas veces no es favorable y nos deprime. Recuerda que eres único y tu camino también. Lo haces lo mejor que puedes.
LOS JUICIOS
Al terminar el año, es inevitable reflexionar sobre lo que pasó y muchas veces sale el juez interior a flagelarnos. Cambia tu mirada y haz que los errores que cometiste y los proyectos que no cumpliste sean maestros que te ayuden a crecer.
Espero que a ti, como a mi, te sirva saber que no estás solo en la depresión navideña y que entender que es lo que la causa te ayude a sentirte mejor.
Ho ho ho,
Bendiciones y amor,
Elena Santos
