Te quiero, gracias, aprecio enormemente lo que haces. Palabras que se me han quedado atoradas en la garganta por pena, por pensar que no viene al caso, por miedo a que no sean bien recibidas, que piensen que soy parte de los cariñositos.
Te imaginas la diferencia que podrías hacer en tu vida y en la de los demás si estas fueran tus palabras más comunes.
Por eso este año me propongo decirlo. Sí, decirlo a los cuatro vientos, aunque la señorita de Liverpool me vea raro, le voy a decir lo eficiente y amable fue.
Sí, voy a ser valiente y se que ese pequeño cambio en mi hará que todo a mi alrededor cambie.
Sí como yo, quieres que tu vida sea más amable, no te pierdas esta profunda reflexión de Osho.
¡¡Gracias por leerme, aprecio enormemente el que estés aquí!!
(ves ya lo dije y sé que sonreíste)
SALIR A DAR VIDA
Salir a escuchar, a abrazar,
a servir, a ayudar, a brindar alegría.
Salir a la vida a poner en práctica esas palabras tan difíciles que son:
“Cuenta conmigo”,
“¿En qué puedo ayudarte?”,
“Te quiero mucho”,
“Gracias por existir”.
Ama a los que te rodean.
Ámalos como son.
Ámalos aunque no los comprendas.
Aunque sean distintos.
Ámalos aunque ellos no puedan amarte.
Ayúdalos en todo lo que puedas.
Dile, por lo menos
a 5 personas por día, lo importante que son
para ti y cómo ellos embellecen tu vida.
Exprésales que están allí y que el mundo con ellos es un lugar mejor y amando así, tu propia vida se enriquece.
Amigos queridos, recuerden
Que cuanto más amor damos,
más amor generamos en nosotros y en los demás.
Salgamos a la vida a expresar el amor que tenemos dentro, a amar todo y a todos incondicionalmente y verán cómo la vida los envuelve en amor y protección divina todo el tiempo…
Osho