Ese villano se llama agobio y se la pasa pensando en esos pequeños detalles que le quitan toda la diversión al asunto.
Su frase favorita es: ¿y a qué horas piensas hacer todo esto?
Con ésta preguntita paso del gozo al pozo y todo aquello que me había parecido tan buena idea y tan emocionante se convierte en una carga enorme en donde el miedo manda. Llenando mi cabeza de dudas y de negatividades tipo:
No vas a poder, está muy apretado, es demasiado, no va a salir bien y chuladas así que me desmoralizan completamente.
Así que aquí hay de dos sopas; Sopa numero uno, cancelar, decir que no y dejar de hacer eso que amo y que me encanta a favor de mi paz y mi sosiego. Lo cual, ojo, no tiene nada de malo y es muy sano a veces.
Sopa numero dos, aplicar las tres palabras mágicas que adormecen al agobio y que me permiten hacer lo que quiero.
Y estas tres palabritas son mágicas, porque me centran en el aquí y en el ahora y ponen mi atención en los sis, en lo que si tengo, en lo que si puedo y en lo que si quiero, me disciplinan y me llenan de energía para poderle seguir.
Cuando me digo SOLO POR HOY, el agobio desaparece y esa personita que vive en mi cabeza se siente feliz haciendo todo eso que ama.
¡¡SOLO POR HOY pruébalo!! Lo único que vas a perder es el agobio.
Muchas bendiciones para ti,
Elena Santos
