Tú no estás para saberlo pero hace 24 años me pasó una de las peoresmejores cosas que me han pasado en la vida.
Un 8 de mayo me encontré a mi misma en el peor ataque de ansiedad que he tenido jamás. Era tal mi angustia que en el único lugar donde me sentía más o menos segura, era debajo de la mesa del comedor.
Acababa de nacer mi tercera hija y yo no podía entender porque, si tenía todo para ser muy feliz, estaba en uno de los peores momentos de mi vida.
Toda mujer que haya experimentado ansiedad posparto me podrá entender.
Todo divino y yo en el terror, rumiando mi angustia, hasta que llegó mi tabla de salvamento, mis super héroes.
Dos acciones que hasta hoy me siguen ayudando día tras día y que le han dado sentido a mi vida, acompañando a cientos de personas a salir de la mesa del comedor: terapia y meditación.
El camino espiritual muchas veces, empieza así, con lo peor que te ha pasado en la vida.
Con algo que no te gustó, que no fue como tú querías, con algo que te decepcionó, con una pérdida, con una profunda incomodidad que te lleva a moverte, a buscar, a tratar de encontrar respuestas.
De eso se trata el camino, de encontrar las respuestas que te dan paz. De encontrar aquello que realmente no se mueve, de tocar tu Ser. De detener el tiempo y el espacio en un eterno aquí y ahora, en un despertar donde te haces consciente de ser el soñador del sueño. En donde tomas las riendas de la vida y te conviertes en la dueña.
Y toooooooodo esto empieza a partir de lo peor.
Así que, la próxima vez que te encuentres angustiado, debajo de una mesa. Cuando creas que es lo peor que te ha pasado en la vida, muévete, despierta, trabaja en ti y verás que con el tiempo ese peor se convierte en el peormejor, en el despertar.
Mucho amor para ti,
Elena Santos